Blogia

Bitácora en la Ciudad.

Bajo los árboles.

Bajo los árboles.

Hay días en los que la lluvia te moja la cara y tú miras hacia arriba para notarla.
Hay días que notas todo en ti, sientes cada gota y te hace renacer, sentirte bien.
Hay días que notas que eres tú quién también estas lloviendo.
Hay días que la lluvia te coge bajo arboles mojados...

Viaje en tren.

Viaje en tren.

Sentada en un tren en marcha, la vida transcurre como un viaje en tren.
A veces, alguien sube al mismo vagón y te acompaña un trecho, otras, bajamos y damos un vistazo demasiado rápido por un paraje desconocido.

Y volvemos a subir al tren con la sensación de no haber visto nada en realidad, muchos lugares, sensaciones , no parar de un lado para otro, pero sin captar la esencia, sin descubrir secretos, sin acercarnos demasiado a quién habita, sintiendo que sólo hemos visto la fachada, los monumentos, lo que se ve a simple vista.
sentados de nuevo, el tren vuelve a ponerse en marcha y se aleja de la escena y nos quedamos llenos de preguntas y de deseos que apagamos, deseos de quedarnos más tiempo en ese lugar que ya se va alejando de la vista y, pronto, sólo será pasado.
seguimos el viaje, mirando por la ventana un paisaje en penumbra que no sabremos cómo dibujar o pintar.


————
Encima del asiento los libros que leo a sorbos .
En la mesa, los papeles que he sacado del cajón con historias empezadas y no acabadas (relato, alguna novela, una obra de teatro: personajes solitarios enfrentados a situaciones diferentes, batallas de la vida).
Un viaje en tren que recuerda, como esas despedidas que llegan con el silencio, sin decir adiós, simplemente callan las voces y tú te dispones en tu tiempo de soledad a mirar por la ventana ese paisaje en penumbras.

Buscando

Buscando

“Uno se cree, que las mató, el tiempo y la ausencia. Pero su tren, vendió boleto de ida y vuelta. Son aquellas pequeñas cosas, que nos dejó un tiempo de rosas, en un rincón, en un papel o en un cajón ...” Serrat.

Ayer buscando algo que escribí hace tiempo, me encontré conmigo misma y también tuve desencuentros, parece una contradicción, supongo que todos en algún momento ha vivido esta situación, fue encontrarme y desencontrarme, conocí y recordé a una persona qué espero aún siga en mi.

Empecé a buscar algo escrito hace tiempo y me reencontré con muchos objetos, fotos, libros, letras ... todo menos el escrito.

Pequeñas Cosas

Me reencontré con mi cuaderno de música del instituto, (curioso lo último que escribí fué mi nombre Llibre Vermell de Montserrat (libro rojo) de Montserrat. y ¡la letra! ¿yo escribía así?

Seguí con mi búsqueda y me encontré una foto de 3 niños montados (diría "acoplados") con mofletes gordos, rubios y dos niñas que se parecen sospechosamente, entre otros objetos, libros forrados con papel para que no se vea la cubierta (ya leía creo yo "cosas prohibidas"), muchos cuadernos, diarios, con la letra cambiada por los años, un mechero (para no olvidarme a mi misma o recordar una noche), un examen de matemáticas con un 10 (recuerdo que para mí era un juego), mi Travelcard de mi vivencia en Londres, unos caramelos regalo especial de una mujer mayor que fué exclusivamente a Madrid a comprarlos (le ayude con Juana La Loca y Rita La Cantaora ( para su bar en su pueblo,15 habitantes), y seguía buscando... mas fotos, postales, mis primeros paquetes de tabaco (Ducados negro), y al final encontré el escrito en el último libro, ¿como no? estaba en "mi diario" uno de los primeros, no el primero pero si el más especial para mí, recuerdo que podía escribir varias veces al día con hojas de arboles, las fotos entre medias, los tachones, las notas a los márgenes, el olor ... y más.

pero ! Lo encontré !.

Mi cerezo.

Mi cerezo.

“Lo que la primavera hace con los cerezos” 🍒 Neruda.

Libros, letras, verano…

Libros, letras, verano…

El mar 🌊 tiene misterios, el Amor le da sabor a la tertulia…

Mar, letras...

 A embestidas suaves y rosas, la madrugada te iba poniendo nombres:
Sueño equivocado, Ángel sin salida, Mentira de lluvia en bosque.
    Al lindero de mi alma, que recuerda los ríos,
indecisa, dudó, inmóvil:
¿Vertida estrella, Confusa luz en la noche, Cristal sin voces?
    No.
Error de nieve en agua, tu nombre.
. El sonido de los grillos me acompañan en la noche.

El Aaiún (Viaje)

El Aaiún (Viaje)

Correspondencia… agradecimiento a Susana Guzner.

Correspondencia… agradecimiento a Susana Guzner.

Microcuento.

Microcuento.

La encontraron dormida en una rama.

Otoño.

Otoño.

Tener Alas

Tener Alas

Volvería a pintarte si me lo pidieras; como aquella noche en que fuimos indios, destrozamos tu camisa y acabamos en el río.
¿Te acuerdas del paisaje? En la piscina juraría que aún queda agua de posguerra y la luna, que se refleja en ella, le regalaba su juventud.
Aquella noche las estrellas hicieron un pacto y todos los destellos iban a tus ojos, yo, ensimismada, me acurrucaba en tus brazos. La brisa hacia bailar a las ramas del sauce llorón que nos tapaba del resto del mundo y Doña Lechuza vigilaba nuestra guarida secreta..
Foto: Aldeanueva del Camino

Secreto.

Secreto.

Será...

Será...

Será que estoy más sensible,
será que escucho más y hablo menos,
será que me retomo constantemente,
será este tiempo, será el acabar con horarios,
será el encontrase al doblar una esquina,
será que me gusta el tiempo en un parque,
será que me gusta observar la vida,
será...


Chueca era Bloomsbury

Chueca era Bloomsbury

Se cumplió la consigna de Lorca: jotos de México, pájaros de la Habana, gays del Universo, que un día fueron carne para la fusta, tomaron Madrid y dieron una patada a los peinadores de seda.

...nadie podría soñar que las manolas de Malasaña un día serían el bloque transformador, ni que Chueca sería Bloomsbury, ni que Madrid se convertiría, como escribe Javier Cid, en el kilómetro cero del Orgullo Gay.

Madrid, aquella ciudad sin noche, que un día se llenó de sangre y vidrios, se pobló de las brigadas internacionales en bikinis, ángeles y drag queens.

Cuando Virginia Woolf pensó que ambos sexos comparten instintos, pero lo de luchar es un hábito del hombre, no podía imaginar cómo las mujeres españolas iban a conquistar el poder.

EllAs ya no pretenden ser ni mágicas ni sobrenaturales, sino guerreras, gustaban cuando callaban, pero ya no paran de hablar.

¿quien ha dicho que no saben luchar?"

Me preguntas…

Me preguntas…

Día del Libro.

Día del Libro.

Práctica 4.

Práctica 4.

Práctica 4 Escuela de escritores, Madrid.
Practica Tema 4
Cuento "La fe" de Monzo, Quim
Propuesta partiendo de la situación narrada. escribir siendo narrador omnisciente u omnisciente limitado completar el relato, hacer que el protagonista luche por resolver su conflicto.

Texto.

Raúl no podía olvidar las palabras que había oído, las peguntas y reproches se repetian en un bucle infinito en su cabeza, temeroso pensaba si eran ciertas algunas afirmaciones que ella compartió con él.
Sentado, recordó algo que leyó hace tiempo, le venia la frase como un flash entrelazada con las que había escuchado de ella, "El amor es un impulso creativo" ¡El amor como acto creativo!, en su relacion no hay creacion, no hay accion no era algo vivo, pulsante, no hay riesgos, es un amór cotidiano sin sorpresas, su relación no es un todo.
Le golpeaba en la cabeza, frases sueltas que escuchaba en su rutina , en el autobús, en la oficina frases de amigos, familia, compañeros, se quedaban ahí en su pensamiento revolviéndolo todo, su cabeza repetía una y otra vez, "En una relación no debe de haber seguridad, la seguridad es para los conformistas". "El amor es inconformista, "no hay garantías establecidas","en el amor no hay apaños"
Se acercaba San Valentín, pensó en regalarle algo que le sorprendiera, algo para salir de la rutina, algo que le hiciera sentir emoción y apego por la vida, tuvo un momento donde se preguntó ¿pero este algo extraordinario reflejaría el amor por ella, o es solo un reflejo amoroso que realizamos todos por las mismas fechas?, ¿es algo impuesto, algo social?

El amor no es consumista, si es así, el amor es consumo y no sentimiento.
El amor se ha convertido en unas reglas establecidas que poco tienen que ver con la bocanada de vida que representa.
Raúl se va perdiendo entre tanto pensamiento que le impactan como proyectiles en la cabeza, se pregunta ¿quiero este amor?, ¿es amor o costumbre?, El mismo estaba creando una verdad, una respuesta a todas las dudas que ella construía todos los dias. Raúl con toda esta maraña de información que le comia la cabeza.

Arrancó la hoja y la guardo para dársela a ella, escribió.

Mi amor es una inercia cotidiana que me consume.

Etiquetas: prácticas, escuela, escritores, yo misma, Madrid, letras

Papá.

Papá.

¿No puede?

¿No puede?

Al despertar.

Al despertar.

Por la mañana la rutina no me dejó ver lo que había pensado, pero ahora, sola en mi habitación, comienzo a darme cuenta.

Hay risas en el salón, pero no puedo ni quiero unirme a ellas.

Leo algún libro, escucho música...

Sé que estoy triste, lo noto en mis ojos, lo puedo sentir en el nudo que se forma en mi garganta, pero no voy a llorar, no pienso llorar.

A veces me gustaría estar sola para siempre, caminar sin rumbo para siempre y no hablar con nadie para siempre.

A veces el mundo se vuelve tan grande que el miedo viene a dormir conmigo y yo ya no lo quiero, ni siquiera él es buena compañía.

Susurro cosas a mi oído, hago muecas a mi rostro y sé que estoy triste, pero no voy a llorar, no quiero llorar.

Se me ocurre que la vida es de cada uno, se me ocurre que tiene que hacer frío allá afuera, está lloviendo.

Hago llama del tabaco y me quedo mirando el rojo incandescente como va tomando toda la madera y siento el calor en mi mano.

Sueño grandes motivaciones que están en tiempo de espera, imagino intensas conversaciones que solo tengo conmigo y me digo que no importa.

Ahora mi mundo es más amplio, ahora imagino y sueño sin preguntar si puedo hacerlo, ahora simplemente lo hago.

Las lágrimas ya están aquí, en las cuencas de mis ojos se empeñan en hacerme compañía y poco a poco descienden por mi rostro a pesar de mi disconformidad porque lo hagan.

Cuando ha pasado un rato, encuentro que las lágrimas son buena compañía en soledad, que te hacen sentir terriblemente bien, soberanamente vulnerable.

Me gusta, su compañía me gusta y creo que me la quedaré, si, creo que lo haré.

Siempre que me pierda, lloraré tan profundo que ellas lo sabrán.

Vendrán sin opiniones absurdas, sin consejos, sin compasión...

Simplemente vendrán.